SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, República Dominicana.- Cuarenta fábricas de la zona franca aquí han reiniciado labores con un reducido personal, con la autorización del Consejo Nacional de Zonas Francas de Exportación.
Fernando García, director de operaciones del complejo, informó que de 20 mil empleados que tiene el área sólo siete mil están laborando, siguiendo un protocolo basado en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y el Ministerio de Salud Pública dominicano.
Cámara de Comercio pide plan
Por otro lado, la Cámara de Comercio y Producción de Santiago pidió al Gobierno un plan para la reapertura de establecimientos comerciales en esta ciudad.
Dijo que tal y como se ha hecho en otros países, se debe implementar un cronograma que sirva de orientación a los empresarios para conocer el orden y ritmo de la economía.
“ Tendremos que adaptarnos a un nuevo estilo de vida, por mucho tiempo permanecerán las prevenciones y el distanciamiento social”, indica la entidad, que preside el empresario Juan Carlos Hernández.
Entiende que debe prevalecer una tendencia al consumo de los productos nacionales, “ya que debemos fortalecer la balanza de pagos del país, que quedará muy afectada después de la crisis provocada por pandemia”.
Cámara de Comercio pide flexibilización
La protección de los empleos y la sobrevivencia de muchas empresas dependen de una gradual pero no muy lejana apertura de la economía, acompañada de transformaciones profundas y evolutivas, consideró la Asociación de Empresas del Centro de Santiago (ASECENSA).
La entidad, que agrupa empresas del centro histórico, expuso que “valora el esfuerzo de las autoridades dominicanas ante la actual crisis que enfrenta el país, y los exhorta a ir flexibilizando las disposiciones de cierre del sector comercio”.
“Es fundamental sumar todos los esfuerzos posibles, a través de una alianza pública-privada, que permita una efectiva activación económica, minimice el impacto de esta crisis y garantice la recuperación de las empresas que se vieron obligadas al cese total de sus actividades productivas”, expresó José Octavio Reinoso, directivo de la institución.
Apuntó que desde el inicio del confinamiento, el Comité de Emergencia de ASECENSA se ha mantenido monitoreando la situación y elaborando el “Plan de Contingencia COVID-19” para apoyar a sus miembros en la reapertura y que estos pongan en marcha todas las medidas de seguridad y prevención requeridas.
Reinoso manifestó, que las empresas del comercio están atravesando la crisis más agresiva de la historia reciente y que esta no terminará cuando puedan volver a abrir sus puertas. “Los nuevos protocolos de higiene y protección sanitaria, la adopción de tecnología para cumplir con los nuevos hábitos del consumidor, la reorientación del personal y la sensibilidad sobre el factor precio, conllevará un aumento de costos y un esfuerzo de transformación importante”, afirmó.
